La hernia discal es un fenómeno íntimamente relacionado con problemas de
espalda de todo tipo, dolorosos, invalidantes y
con irradiaciones a larga distancia como las piernas o los brazos.
Estructuras
El disco intervertebral lo encontramos entre todas y cada una de las
vértebras de la columna y su función consiste, entre otras, en mantener un
espacio entre vértebra y vértebra y en servir de amortiguador e los
movimientos de la columna.
Este disco está compuesto de dos partes, un núcleo, llamado núcleo pulposo,
y un anillo, llamado anillo fibroso, que recubre al núcleo.
Funciones del disco intervertebral
El núcleo está compuesto en su mayor parte de agua, que durante el
día, gracias a la presión ejercida por
el peso del cuerpo sobre los discos, la pierde haciendo que está se desplace
hacia el anillo fibroso y haciendo así que se mantenga hidratado. Durante la
noche, al descansar, esta agua es reabsorbida por el núcleo.
Patología
Este proceso con los años hace que paulatinamente el núcleo pierda agua,
perdiendo así el disco su hidratación y por consecuencia su elasticidad y
resistencia, de forma que el anillo fibroso degenera y se agrieta, dando lugar
a la fuga, a través de la fisura, del núcleo y perdiendo así finalmente la
posibilidad de rehidratación.
Esta pérdida del núcleo a través de las fisuras o grietas conlleva
asociados otros grandes problemas, la pérdida de altura del disco por la
deshidratación y la pérdida del núcleo hace que los agujeros de conjunción,
agujeros por donde los nervios de la médula salen de la columna para dirigirse
a sus diferentes destinos (órganos, músculos….), queden disminuidos en tamaño,
provocando en muchas ocasiones el pinzamiento del nervio de forma ocasional o
de forma crónica. Otro gran problema es la invasión del canal medular por parte
del núcleo, que provoca problemas de irradiación nerviosa en puntos distales y
malfuncionamiento de diversas estructuras.
Es evidente que ninguna terapia manual puede solventar este problema, una
vez el disco se ha herniado es imposible, manualmente hablando, hacer que se
reabsorba el núcleo y muchísimo menos hacer que
las fisuras creadas y la deshidratación se solventen.
Desde el Quiromasaje y la Osteopatía tan solo podemos ofrecer terapias muy
conservadoras que durante las etapas que no sean de crisis aguda intenten
conservar el espacio intervertebral e intentar que el proceso degenerativo se
ralentice.
Si bien es cierto que no es posible reducir a 0 los riesgos de sufrir una
hernia discal, como en la mayoría de las ocasiones ocurre, la mejor terapia es
una buena prevención, caso en el que la Osteopatía y el Quiromasaje si pueden
decir mucho, manteniendo la movilidad de las articulaciones, un tono muscular
adecuado y una vida sana y saludable se reducen los riesgos de sufrir esta patología.
En esta imagen podemos observar como es un disco intervertebral.
En esta imagen podemos ver representado el pequeño espacio por el que el nervio raquideo abandona la columna, motivo por el cual la degeneración del disco intervertebral provoca el atrapamiento del nervio entre la vérterbra superior y la inferior.
Aqui podemos observar diferentes estadios y diferentes configuraciones de una hérnia.